Conforme a los criterios de
“Los consumidores deben devolver inmediatamente de cualquier producto restante a la tienda donde lo compraron. La leche pasteurizada sigue siendo segura para beber”, indicaron desde la agencia. En esa línea, el CDPH agregó que “por precaución y debido a la propagación continua de la gripe aviar en vacas lecheras, aves de corral y casos humanos esporádicos, los consumidores no deben consumir ninguna de las leches crudas afectadas“.
La prueba, llevada a cabo como “una segunda línea de protección al consumidor”, fue verificada posteriormente por el Sistema de Laboratorio de Salud Animal y Seguridad Alimentaria de California. Por su parte, Raw Farm emitió un comunicado en el que detalló que “todos los resultados de las pruebas realizadas por RAW FARM y todas las pruebas oficiales realizadas por CDFA han sido NEGATIVOS“.
Mientras la mayor parte de la leche se vende en las tiendas es sometida al proceso de pasteurizaciónen el cual las empresas calientan el contenido a una elevada temperatura para matar virus y gérmenes, la leche cruda no atraviesa el mismo proceso. Al respecto, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan consumir leche o productos lácteos pasteurizados debido a que el proceso “ha reducido en gran medida las enfermedades transmitidas por la leche”.
Los riesgos de la grave enfermedad detectada en botellas de leche
A través del comunicado, el CDPH señaló las repetidas alertas de los profesionales sobre los distintos riesgos de contraer enfermedades transmitidas por los alimentos al consumir botellas de leche cruda.
De ese modo, la agencia indicó luego que se han detectado “brotes de Salmonella, Listeria monocytogenes, E. coli productora de toxinas, Brucella, Campylobacter y muchas otras bacterias”. relacionados con el consumo de productos lácteos crudos“.
Los Los síntomas de la enfermedad de la gripe aviar incluyen enrojecimiento o secreción de los ojos, tos, dolor de garganta, congestión o goteo nasal, diarrea, vómitos, dolores musculares o corporales, dolores de cabeza, fatiga, dificultad para respirar y fiebre. Si bebió una botella de leche cruda y posee algún síntoma mencionado, debe comunicarse de inmediato con su proveedor de atención médica o con el departamento de salud local.