‘La virtud es seguir haciendo música en una época donde ya todo cambió’

Aunque viven en Ciudad de México desde hace un año, LosPetitfellas siguen siendo referentes de la música alternativa colombiana. La banda bogotana está conformada por Nicolás Barragán (Nicolai Fella), Sebastián Panesso, Daniel Pedroza, Andrés Gómez (Nano) y César Henaoquienes desde 2012 cuentan historias a través de una mezcla de géneros como el hip-hop, jazz y funk, ya veces juegan con ritmos de rock, salsa y alma.

Después de una serie de conciertos para celebrar los 10 años de ‘Historias mínimas’, el álbum que los posicionó como una banda independiente en la ciudad y con el que se declararon al mundo como creativos, noctámbulos y rolos, este año han estrenado dos sencillos: ‘El sol’ y ‘Música de contrabando’, canciones que homenajean las travesías, buenas y malas, que han cruzado juntos estos cinco amigos.

EL TIEMPO conversó con Sebastián Panesso (guitarrista) y Nane (tecladista) sobre su colaboración en Valorant, sus últimos estrenos y el nuevo álbum en el que están trabajando. Dicen que su manifiesto es cambiante, al igual que su música y los relatos que cuentan y transforman en canciones al ritmo de la ciudad que habiten.

Su canción Sputnik acaba de aparecer en la sincronización musical del videojuego Valorant ¿Cómo se siente con esa colaboración?

Sebastián Panesso (S.P): La colaboración surgió por nuestros mánagers que facilitaron la conexión con el equipo de sincronización en Estados Unidos, quienes se encargaron de mostrar la canción de Riot Games. A partir de ahí, se dio un proceso de negociación que culminó en un acuerdo para lograr esta sincronización. Que nuestra música sea parte de este juego tan popular nos llena de alegría.

Están viviendo en México y es evidente que sus últimas canciones hablan de eso. ¿Cómo se relaciona esa experiencia con la música que hacen ahora?

Andrés Gómez (Nane): Nuestra idea era llegar allá a hacer canciones ya encontrar musas en todos los lugares donde fuese posible. Respirar para hacer música. Las dos canciones que han salido ‘El sol’, que fue la primera, y ahora ‘Música de contrabando’ hablan mucho de eso. Estamos en un momento donde hablamos de nuestro estado como banda. Lo que ha estado sucediendo en México ha sido una experiencia muy interesante. Creo que ha sido como un salto al vacío por parte de nosotros cinco, saltamos a ver qué pasaba sin saber nada. Ha sido creer en lo que puedes hacer.

En el video de ‘El sol’ aparece en los créditos: Música de Contrabando Récords, o sea que no es solo una canción…

S.P: El Música de Contrabando Récords es una frase que tenemos hace muchos años, porque siempre hemos tenido esa idea latente de que la música independiente que hacemos nosotros está en nuestras manos y es nuestro sello. Hace años dijimos: “si tuviéramos una disquera, se llamaría Música de Contrabando Récords” y, en ese orden de ideas, llevamos mucho tiempo publicando cositas alrededor de esto. Solo que se hace aún más fuerte estando lejos de tu país natal. Vives más fuerte esta idiosincrasia de lo que soy yo, de dónde vengo y lo que estoy haciendo. Se vuelve una canción por eso mismo, es como un declaraciónno solamente al barrio donde allá vivimos, sino a cómo se transforma uno y lo que es y nunca deja de ser. La canción es una oda a nuestra amistad. El Música de Contrabando Récords viene de todo esto que llevamos haciendo desde hace un par de años y que nos encanta. Nosotros tratamos de hilar nuestras discos de alguna manera, porque no estamos solamente haciendo canciones. Nosotros estamos narrando nuestra vida entre líneas de notas y de palabras. Es bonito que hayas llegado a ese punto porque la carretera ya dónde venimos llegando en este nuevo disco tiene mucho que ver con lo que viene de antes, con lo que somos.

Música de Contrabando también parece nombre de álbum. ¿Así se va a llamar el álbum nuevo o todavía no tiene nombre?

Nana: Pues, no tiene nombre la verdad. Es de esas cosas que casi al final la sabemos. La misma música nos lo va mostrando. ¿Quién sabe, podría ser? No sé, podría ser. Es un buen nombre. Ahí se va formando.

Las letras de las últimas canciones apelan mucho a la fuerza interna de quien las escucha. ¿Por ahí va la apuesta temática de la banda ahora?

S.P: Totalmente, creo que nos hemos ganado un pulso todo lo que hemos hecho. Apelamos a quien lo siente ya quien lo escucha, porque es honesto. Si hay alguien afuera que nos escucha y lleva nuestras canciones, por supuesto que le agradecemos. No hay una sensación más satisfactoria que saber que estás haciendo lo que te ha dado la gana. Incluso yéndote en contra de la corriente como el salmón y diciendo: “Yo no quiero ir por ahí. Yo quiero ir por acá”. Muchas veces los significados no son los que uno tiene cuando crea la música, pero eso no lo hace más bello, ni tampoco malo, es la reflexión de cómo el arte transforma la percepción de la gente. Si hay algo forjado con nuestras manos y hay alguien afuera que lo siente y lo llena, eso es un gran premio. Creo que es de los mejores, si es que hay premios en la música de ese tipo, porque el premio más grande es poder hacerla y vivir detrás de ella, siendo un medio.

Su álbum más icónico, ‘Historias mínimas’, cumplió 10 años y han hecho varios conciertos de celebración. ¿Cómo ha sido esa gira?

Nana: Ay, pues ojalá nunca se acabará. Ha sido muy lindo. En la gira les dimos un espacio y tocamos las canciones que normalmente uno no puede tocar. Igual se viene un par de muestra más, Estamos pensando en hacer algo así para México.pero estamos ultimando los detalles. Esta gira nos ha dejado un muy buen sabor de canciones que hace mucho no tocábamos, eso también nos ha permitido descubrir de otra forma nuestras canciones, nuestro quehacer como banda en vivo.

‘Historias mínimas’ es un manifiesto de una banda que estaba creciendo. ¿Cuál es su manifiesto actual?

S.P: La virtud de seguir haciendo música en una época donde ya todo cambió hace tanto tiempo. Me gusta mucho la resiliencia con la que vivimos hoy en día, porque ya después de un camino labrado sabemos que ahora la responsabilidad es más grande y eso lo hace más bello. Hoy, nosotros también hacemos esto por nosotros, porque nos lo merecemos y nos encanta poder seguir haciendo música. Hace 10 años era una apuesta, hoy en día es una certeza. Es muy bello haber pasado ya una década, porque eso quiere decir que hay dos o tres más. El manifiesto es seguir haciendo arte y seguir contando una historia para que la gente se sorprenda. Nos alegra mucho la vida poder ver a la cara a la gente, ver sus reacciones y decir “lo estamos haciendo”. Que la gente tenga sorpresa. Nuestro manifiesto de hoy es seguir siendo resistentes para hacer la música que queremos nosotros, con la certeza de que llevamos un rato y eso nos hace felices.

Llevan 12 años haciendo música ¿a qué atribuyen seguir todavía juntos?

Nana: A Diosito que nos bendijo con mucha paciencia y amor. No, mira, Siento que hemos pasado por momentos muy duros, pero los hemos pasado con mucha responsabilidad emocional. Hemos podido darnos cuenta de que somos una familia muy bonita y nos tenemos. Ha sido también como lo dice Drexler “entrar al mar por la parte más honda” y por este reto que nos hemos puesto. Nos encontramos en lugares muy difíciles y habernos abrazado allí hace que nos podamos mantener firmes y saber que tendría que pasar un temblor muy fuerte para terminarlo. O, simplemente, una decisión desde el corazón de cualquiera de nosotros para no hacerlo más. Ya pasó la etapa del drama, el ego, la pasión, la infidelidad. Hasta aquí todo ha sido crecer.

Leidy Restrepo Mesa

Escuela de Periodismo Multimedia El Tiempo